Soy casada, vine a encontrar chicos pervertidos y calientes, que me digan cositas ricas. Por las noches me dan unas ganas de mamar una verga que no sea la de siempre. Cuando me gusta un hombre, simplemente soy un poquito sometida, parecido a mis hilitos. Me encanta caminar por la calle y ver como se me quedan viendo mis hilos en transparencia. Caminar se siente tan rico como se me entrometerme entre mis pompas redondas y esponjosas. Mmm, hasta quisiera sentir algo mas que el roce de mis hilos sudaditos de tanto caminar.